Después de 3 años de duro trabajo, de espera e impaciencia por parte de su público fiel, hace unos días vió la luz el esperado segundo disco de Marcos del Valle, "Coma". No sé si el título se refiere a una pausa breve entre palabras o a este largo periodo de "silencio en directo" al que nos ha sometido el artista antes conocido como Markhitos.
En cualquier caso ya está aquí y tengo que decir que la espera ha merecido la pena, "Coma" se nos ha revelado como un disco muy maduro y trabajado (mucho más que "Futuro Pasado", anterior trabajo de Marcos) y el resultado es un buen disco, de esos que gustan y se pueden oír una y otra vez.
También tengo que decir, que desde mi punto de vista hay varias canciones que destacan sobre las demás, y que lejos de desmerecer a estas hacen que el disco sea mucho más completo.
El pasado 17 de abril de 2010 fue la presentación oficial del disco en la Sala Clamores de Madrid. Esta presentación fue un éxito de público, ya que según el propio artista fuimos 150 personas los que coreamos y aplaudimos sus canciones.
Ha sido en el concierto donde yo he visto esa evolución y madurez de la que hablaba antes, de hecho para mi esto ha sido una revelación sorprendente, no porque piense que Marcos no era maduro antes, sino porque ayer le vi liderar una buena banda de músicos y sentí que por fin, además de divertirse, Marcos ha decidido ser profesional y hacer las cosas bien. Esto no quiere decir que el concierto fuera perfecto, ni mucho menos, pero los fallos fueron menores.
La canción más celebrada fue sin duda "El Mundo se ve Bien", que nos dejó clavados en el sitio al más puro estilo Anthony and The Johnsons, un piano solista, una letra triste y una buena voz. Esta canción, aunque escrita hace tiempo no está incluida en "Coma" y formará parte del próximo lanzamiento de Marcos del Valle.
Pero por encima de todo lo que acabo de decir, a mi lo que más me gustó fue cuando en una canción catalogada por el artista como "discotequera" y con mucho ritmo, Marcos dió un paso atrás y alentó a sus músicos a la voz de "¡esa banda!", y la banda respondió como es debido, un gran momento.
Nada más que contaros desde aquí, sólo dar las gracias a Marcos del Valle y sus músicos por regalarnos este gran espectáculo.
