Bienvenidos

Espero que os guste esta nueva "aventura" en la que me embarco.

jueves, 8 de mayo de 2014

Crónica De Una Muerte Anunciada

Hace unos día murió mi escritor favorito, y supongo que el de millones de personas en todo el planeta.

Gabriel García Márquez es y será uno de las personas con mayor imaginación de todos los que estamos por aquí y de los escritores de la historia de la literatura, yo siempre le he considerado un genio y he sido transportado a mundos que no hubiera sido capaz de imaginar, gracias a sus inteligencia superior.

El libro que da nombre a este post es sin duda mi libro favorito, lo he leído al menos 10 veces sin que en ninguna haya sentido al más mínimo atisbo de aburrimiento. Recuerdo que la primera vez que lo leí no fui capaz de comprender la dimensión de lo que me pasaba, estaba aturdido y emocionado al mismo tiempo, ¿como alguien es capaz de escribir algo tan bien hecho?, no salía de mi asombro.

Es cierto que García Márquez tiene un estilo muy particular que no a todo el mundo le gusta o pueda comprender, no por nada en concreto si no porque sencillamente cada uno estamos preparados o "entrenados" para sentir y comprender cosas muy distintas.

La grandeza de este libro radica en que en la primera página y en el mismo título te están descubriendo el final, aun así y gracias a ese estilo especial del autor el final es lo de menos, lo importante es la historia en sí.

Recuerdo que con Cien Años De Soledad me pasó algo parecido al leer la última página y cerrar el círculo de esa gran historia.

La literatura se ha quedado sin uno de sus hijos predilectos, alguien que escribió la mejor novela del siglo XX y una de las más importantes de la literatura universal, alguien que murió a penas unos días antes que Cervantes y Shakespeare, sus iguales.

Por Crónica De Una Muerte Anunciada, Cien Años De Soledad, El Coronel No Tiene Quien Le Escriba, El Amor En Los Tiempos Del Cólera, Noticia De Un Secuestro y Vivir Para Contarla..., Gracias Gabo!

miércoles, 7 de mayo de 2014

De parto

El pasado 14 de Diciembre de 2013 nacía nuestro hijo Rodrigo.

Después de pasar una noche complicada por las contracciones (empezaron sobre las 23:30), a las 6 de la mañana decidimos ir al hospital porque mi mujer estaba de parto.

Una vez allí, a eso de las 7:30 nos mandan a monitores para controlar y medir las contracciones. Una hora después nos informan de que el parto ha comenzado y nos llevan a un paritorio.

Allí nos atendieron Paula (matrona) y Alicia (enfermera), como es lógico y al ser nuestro primer hijo, los dos estábamos nerviosos por la incertidumbre y nuestra ignorancia en estos aspectos.

En todo momento Paula y Alicia supieron entender nuestro estado de ánimo y nos tranquilizaron a la primera. Se portaron con nosotros como si nos conocieran de toda la vida, nos trataron con mucho cariño y cercanía y además, en todo momento, nos explicaban lo que iban haciendo y por qué. Esto último para mi fue fundamental para poder relajarme y terminar de entender que estábamos en las mejores manos posibles.

No tengo más que palabras de agradecimiento para ellas, de verdad, aquello fue algo precioso gracias a ellas en mayor medida.

Espero que todo les vaya genial, no se merecen otra cosa, lo que hacen es increíble y no podemos dejarlo caer en el olvido. Siempre hemos confiado en la sanidad pública y después de aquello muchísimo más.

Un abrazo muy fuerte para ellas y todos los que hacen posible que gente como nosotros podamos confiarles la salud de nuestros hijos.

GRACIAS!!